El espeso bolo alimenticio de una de las pizzas de Ayuso me ha hecho cagar una compacta metáfora. Recuerdo ahora a las ultraveganas feminazis que abanderaban lo de que los huevos pertenecen a sus gallinas madres (algo que casi nadie les concedió). Los niños, que sí pertenecen a sus padres (“pines” aparte) se alimentan con menús de Telepizza en la Comunidad de Madrid mientras que dure la pandemia. Por obra y gracia, por supuesto, de su san(t)ísima presidenta. He aquí las dos posturas contrapuestas que alumbrarán la extraordinaria tesis que yo sostengo. Atentas. Leer Más

GALLINAS, de Rafael Barrett
Mientras no poseí más que mi catre y mis libros, fui feliz. Ahora poseo nueve gallinas y un gallo, y mi alma está perturbada. Leer Más